Redacción. Madrid
España se encuentra entre los países más avanzados en sistemas de información sanitarios. En el campo de la salud mental, hay iniciativas, como la del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (Cibersam), que desarrolla una serie de plataformas tecnológicas para dar soporte a los grupos de investigación. En esta entrevista, Pedro Moreno, psiquiatra y coeditor de psiquiatria.com nos explica cómo se están aplicando las TIC.
Pedro Moreno.
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¿Cómo se encuentra en nuestro país la implantación de las nuevas tecnologías relacionadas con Internet?
Se está implantando bastante rápido. Muchas administraciones han incluido las TIC dentro de sus estrategias de desarrollo de la salud para los próximos años. Algunas han incorporado observatorios de salud, para hacer un seguimiento de los recursos, aplicaciones y programas que se están desarrollando y hacer una validación de cuáles de ellos son válidos para incorporarlos a los recursos de la administración correspondiente.
Las TIC pueden ayudar a eliminar duplicidades, implantar la receta electrónica, la tarjeta interoperable, la historia clínica digital y la fusión de organismos todo lo cual está ayudando a mejorar la eficiencia.
Según un informe, realizado en ocho países (Australia, Canadá, Inglaterra, Francia, Alemania, Singapur, España y Estados Unidos), España se sitúa entre los más avanzados en sistemas de información sanitarios, sobre todo en el uso de intercambios de información de salud (IIS) y destacando también en la tasa de adopción de tecnologías de la información sanitarias en asistencia primaria.
Por ejemplo, en Cataluña están implantando una red multicanal de comunicación, interacción y atención al ciudadano, a través del portal web Canal Salut y la Carpeta Personal de Salut.
¿Los psiquiatras las están aplicando en su práctica diaria? ¿Todos o sólo los más jóvenes o afines a las nuevas tecnologías?
Los psiquiatras, al igual que el resto de especialistas, están incorporándose con rapidez a los servicios que proporcionan las nuevas tecnologías. Gran número de ellos ya han incorporado muchas aplicaciones de los teléfonos inteligentes y de las tabletas a su quehacer diario. Se encuentran en marcha iniciativas en diferentes ámbitos, tanto a nivel de formación, búsqueda de información, comunicación o terapia. En formación, progresivamente se va abandonado los clásicos modelos de formación teórica a favor de nuevos modelos formativos que incorporan nuevas tecnologías, como la simulación robótica, la teleformación, programas multimedia y otras para la adquisición de habilidades científico técnicas y habilidades relacionadas.
A nivel de investigación el Centro de Investigación Biomédica En Red de Salud Mental establece una serie de plataformas tecnológicas que dan soporte a los grupos de investigación del mismo Cibersam y a grupos externos que realizan investigación en Salud Mental; cuenta con las siguientes plataformas: Banco de ADN, Banco de Instrumentos, Banco de Cerebros, Neuroimagen, y Bases de datos comunes: Gridsam.
¿Cuáles han sido los principales avances de los últimos años en los diferentes campos, incluidas las aplicaciones más recientes para smartphone y tablets?
Se están desarrollando numerosas iniciativas a nivel de diagnóstico, tratamiento, prevención y psicoeducación. El principal avance ha sido la rápida implantación de los teléfonos inteligentes y tabletas, que está permitiendo el desarrollo de todo tipo de aplicaciones y programas, que pueden ayudarnos a hacer los tratamientos más accesibles para todos, facilitar nuestro trabajo y hacerlo más eficiente. Un 80 por ciento de los médicos ya los utilizan. Tenemos aplicaciones para la prevención de las recaídas en depresión y las adicciones, para el manejo del estrés y prácticamente para cada enfermedad.
¿Están colaborando los psiquiatras con empresas de sanidad 2.0 para desarrollar nuevas apps y plataformas?
Sí, hay algunas iniciativas, proyectos y programas muy interesantes, en los que se está trabajando en psiquiatría y salud mental. Por poner algunos ejemplos, Javier García Campayo y su equipo está desarrollando un proyecto de psicoterapia asistida por ordenador. Existe un equipo de la Universidad de Navarra que ha desarrollado el programa Aula Nesplora, para el diagnóstico por ordenador del TDAH. El grupo de Cristina Botella lleva muchos años, desarrollando programas de realidad virtual para el tratamiento de las fobias y problemas de ansiedad. El proyecto Optimi, de inteligencia artificial, predice las recaídas en depresión hasta con un 85 por ciento de fiabilidad. El proyecto Monarca ayuda en el manejo del trastorno bipolar. A nivel de ayuda a los profesionales “el paciente virtual” es la primera herramienta de simulación de consulta de salud mental.
Por nuestra parte, Psiquiatría.com acaba de sacar una aplicación para el móvil, desde la cual se puede estar al día de la actualidad en la especialidad, consultar interacciones de psicofármacos y acceder al texto completo de más de 500 revistas científicas.
¿Cómo están las redes virtuales de pacientes de salud mental? ¿Participan también en ellas los psiquiatras?
Las redes y comunidades virtuales de pacientes están proliferando a gran velocidad, transmiten sensaciones positivas en cuanto a la mejora de la autoestima y la toma de conciencia de los enfermos respecto a su enfermedad. Se ve también que los pacientes se sienten menos solos, que mejoran sus relaciones con los médicos y que saben mejor qué deben preguntar. Las redes sociales dan la oportunidad de compartir experiencias, buscar y recibir información e incluso apoyo emocional online. Facilitan el empoderamiento y la autonomía de los pacientes. En resumen, las redes sociales hacen que los pacientes se encuentren más confiados y más optimistas. En algunas redes son los psiquiatras, los que dan consejos y orientan las preguntas de los pacientes.
¿Hay alguna iniciativa en marcha de consulta virtual?
El proyecto Rediapp que se lleva a cabo en Baleares y en otras comunidades autónomas, pretende atender a pacientes con depresión a través de un programa informático estructurado e interactivo, que guía al paciente a través de una psicoterapia computerizada.
Carlos de las Cuevas, lleva varios años probando la telepsiquiatría en las Islas Canarias. Son ya varios los centros que están poniendo en marcha experiencias similares en varias comunidades autónomas. El lanzamiento de una atención permanente para los enfermos mentales a través de la videoconferencia las 24 horas del día, entre la Atención Primaria de San Sebastián de La Gomera y el Hospital de La Candelaria en Tenerife ha dado resultados muy positivos.
También son numerosos los profesionales que ofrecen sus servicios de consulta privada online a través de diferentes plataformas.
¿Existen apps o software específico para determinadas patologías de salud?
El mercado mundial de aplicaciones médicas para smartphones y tabletas se multiplica prácticamente cada año, hablándose de que ya existen más de 40.000 aplicaciones de salud. Una parte de ellas, están dedicadas a temas relacionados con la psiquiatría y las Salud Mental.
En la actualidad contamos ya con aplicaciones para casi todas las enfermedades. El principal problema es que muchas de ellas están en inglés, que existen pocos estudios que validen su utilidad como complemento de la terapia y que nos faltan referencias de las instituciones para saber cuales de ellas son las más indicadas en cada caso.
¿Qué desarrollos de la sanidad de salud mental ligada a las nuevas tecnologías están teniendo una aceptación mayor?
En mi opinión la formación ha tenido muy buena acogida. Las ventajas de la formación online son muchas, permiten a los profesionales formarse de una manera cómoda, evitando desplazamientos innecesarios y abaratando el coste de la misma, a la vez que mejora la calidad de los materiales multimedia utilizados y la interacción con el resto de alumnos y profesores. La prevención, psicoeducación y los hábitos saludables también están encontrando un terreno fértil con el desarrollo de las nuevas aplicaciones.
¿Por dónde cree que irá el futuro en este sector?
Asistentes virtuales de diagnóstico y tratamiento con inteligencia artificial desde cualquier lugar y en cualquier momento, con la aparición de nuevos dispositivos que faciliten aún más la implantación de las TIC, lo que permitirá aumentar la eficiencia de los programas de salud y permitirán a la medicina volver a los hogares.
La telemedicina permitirá aportar cuidados médicos a grandes cantidades de población con un coste razonable.
Algo más que desee añadir…
Estamos al principio de un proceso que está cambiando muy rápidamente la forma de ejercer la medicina y la psiquiatría. Los nuevos avances tecnológicos, requieren que los ciudadanos, pacientes, profesionales y las propias organizaciones sanitarias, desarrollen cada una de ellas, estrategias digitales para ser más eficientes en el uso e integración de las nuevas tecnologías con los métodos tradicionales de trabajo. |
