Redacción. San Sebastián
El Servicio Vasco de Salud-Osakidetza ha respondido a los sindicatos CCOO, Satse, ELA, LAB, UGT y SAE, que iniciaron en Bilbao un encierro en rechazo al plan diseñado para la Red de Salud Mental de Vizcaya, que el nuevo modelo supone “la ampliación de la plantilla un 3,2 por ciento y ningún despido”.
Jon Etxeberria, director general de Osakidetza.
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En un comunicado, Osakidetza ha destacado que su atención en Salud Mental ha sido “pionera en el abordaje de esta patología dejando atrás el modelo manicomio” y apostando por otro “comunitario que sitúa a las personas con enfermedades mentales como un paciente más”.
Según ha indicado, este enfoque supone que “deben permanecer y recibir los servicios necesarios en su entorno y, por tanto, acceder a los recursos residenciales normalizados a los que accede la ciudadanía sin estigmatizaciones porque la enfermedad mental, es una enfermedad más”.
Osakidetza ha explicado que los denominados “recortes de camas se traducen en una disminución de 35 camas de hospitalización en hospitales psiquiátricos y en la creación de 35 plazas en dispositivos asistenciales integrados en la comunidad” (pisos y residencias sociosanitarias) que cuentan con financiación pública compartida entre la Diputación de Vizcaya y el Ejecutivo vasco.
Además, ha destacado que se han creado 60 plazas más en dispositivos de Tratamiento Asertivo Comunitario (Hospitales de día de la Red de Salud Mental de Osakidetza) que conllevan “menos estigmatizaciones, normalidad para las personas afectadas y sus familias”. Todo ello gestionado por personal de la Red de Salud Mental de Vizcaya.
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