Redacción. Madrid
La Confederación Feafes ha elaborado un documento en el que muestra su apoyo al desarrollo de cuatro medidas terapéuticas enfocadas a la mejora en la atención de las personas con trastorno mental y que pretende evitar el uso de medidas de carácter coactivo. Todas estas medidas están ya contempladas en la Estrategia en Salud Mental del Sistema Nacional de Salud.
José María Sánchez Monge, presidente de Feafes.
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La base del documento es la firme creencia de que la intervención terapéutica para las personas con trastorno mental debe basarse en los principios de atención integral, en línea con los principios de actuación asumidos por la Estrategia de Salud Mental.
En cuanto a las medidas que apoya Feafes, se refieren, por un lado, a los Planes Individualizados de Atención, es decir, articular un plan de atención individualizado para las personas diagnosticadas con trastorno mental grave que estará reflejado por escrito en el historial clínico informatizado del paciente.
Por otro lado se evidencia la importancia del desarrollo y mantenimiento de los Equipos de Intervención Familiar. La propuesta de Feafes es que todas las familias de personas diagnosticadas con trastorno mental grave tengan la oportunidad de acceder a la Intervención Familiar Psicoeducativa que incluya, además de psicoeducación, el entrenamiento en técnicas de comunicación interpersonal, en técnicas de resolución de problemas y en prevención e intervención en crisis.
La tercera medida hace referencia al Apoyo Domiciliario, es decir, disponer en los equipos de salud mental en el ámbito comunitario, de un sistema organizativo para evitar los abandonos, facilitar la adherencia y que incluya la atención domiciliaria.
Por último, desde Feafes se hace hincapié en fortalecer los equipos multidisciplinares que atienden a las personas con enfermedad mental y sus familiares y que debe estar compuesto por un número suficiente de psiquiatras, psicólogos/as, enfermeros/as, trabajadores/as sociales, auxiliares, auxiliares de apoyo domiciliario y otros como terapeutas ocupacionales o técnicos de integración social.
El documento incluye también la especificación de la inversión económica que supondría el desarrollo y mantenimiento de estas cuatro medidas terapéuticas.
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