Hiedra García Sampedro. Madrid
El Servicio de Psiquiatría del Hospital Clínic de Barcelona es “innovador y único” en España y en Europa, según ha comentado a esta publicación su responsable, Eduard Vieta. Su estructura en unidades funcionales le otorga su “particularidad”, pero también es reconocido como “líder nacional” en investigación, docencia y asistencia.
Eduard Vieta, jefe del Servicio de Psiquiatría del Hospital Clínic de Barcelona.
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El Clínic de Barcelona tiene dos servicios de Psiquiatría, el de adultos y el de infanto-juvenil. Eduard Vieta es el jefe del primero desde hace un año, quien señala la alta calidad en investigación, docencia y asistencia del centro, que lo hace ser elegido cada año por los mejores residentes.
En el Servicio de Psiquiatría que dirige Vieta trabajan 125 profesionales, incluyendo psiquiatras, psicólogos, enfermeros, trabajadores sociales o terapeutas ocupacionales que desempeñan su labor de una forma trasversal, lo que potencia la continuidad en la asistencia. “El mismo equipo que atiende a los pacientes cuando están ingresados sigue su evolución de manera ambulatoria”, según comenta el jefe del servicio. Esta es la estructura en unidades funcionales, basadas en patologías. De esta forma, hay tres unidades “muy reconocidas”, afirma Vieta, que son esquizofrenia, trastorno bipolar y adicciones.
Estas unidades de referencia son el reclamo para los residentes de otros hospitales. Según Vieta, a parte de los alumnos de la Facultad que hacen prácticas y los residentes que cada año eligen el centro (médicos, psicólogos y enfermeros), el servicio recibe a profesionales en formación de otros hospitales para hacer rotaciones específicas.
Además, hay una serie de programas en los que el servicio participa junto a otras unidades del hospital. Por ejemplo, sus profesionales prestan servicio a los pacientes con fibromialgia que están en Reumatología; o a los pacientes con párkinson o epilepsia, a quienes hacen pruebas y evalúan su estado mental. También se hace una evaluación a los candidatos en espera de trasplantes, si son adecuados o no. Otras unidades hacen referencia a la atención de la mujer en casos de violencia de género y a trastornos de identidad de género.
Se aconseja a otras unidades del hospital sobre los pacientes que están ingresados. Pero el trabajo también se extiende a Primaria donde los profesionales acuden para asesorar a los médicos de Familia y llevar a cabo intervenciones precoces para prevenir futuros episodios o empeoramientos de las enfermedades.
Hospitalización y consultas externas
La unidad de hospitalización tiene 28 camas “que están llevadas en función de las unidades funcionales”, asegura Vieta. En el hospital de día se atiende en dos módulos, uno intensivo, donde los pacientes dados de alta pueden ser seguidos sin necesidad de quedarse a dormir; y otro de desintoxicación.
El servicio dispone además de una consulta externa para pacientes con alta complejidad, por ejemplo, esquizofrénicos, bipolares, etc; y un centro de salud mental insertado en el servicio que atiende a una población de 150.000 habitantes.
Retos
Como en todos los servicios, mejorar la gestión es uno de los retos futuros de Psiquiatría, según su responsable, Eduard Vieta, quien señala que hay que avanzar en el nivel de información para saber en qué se invierte el dinero.
En cuanto a la asistencia, los objetivos son reducir las listas de espera y en la efectividad para reducir el número de visitas de los pacientes. También se apuesta por integrar la psiquiatría y la psicología.
En definitiva, Eduard Vieta asegura que el Clínic debe mantener y elevar “su gran nivel asistencial, docente y de investigación”, mantener su participación en las redes de investigación como el Cibersam y en las europeas.
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